Cierto es que a mí me gustaría saber esquiar. Sin embargo con lo patosa que soy y el presupuesto que este deporte conlleva me limito a ir a la nieve muy de vez en cuando. Espero a ofertas de última hora o al ofrecimiento de alguna amistad que tiene casa en la nieve y cuadramos un viaje de amigas
Plan al que nunca hay que hacerle ascos 😉
Para los amantes del esquí España es una gozada, creo yo. Residas donde residas, en general, tienes pistas de esquí a cercanas. Si no es a las afueras de Madrid es en La Rioja o en el Pirineo Aragonés, en Granada o Lleida. ¡Y las estaciones de esquí que me dejo en el tintero!
Andorra, el país para esquiar
La ventaja para los que vivimos en Barcelona ciudad es que a 2 horas y media tenemos Andorra. El país al que la nieve le acompaña. Pistas infinitas, karting sobre hielo, airboard, motos de nieve, parques temáticos, etc
¿Quién no se ha decantado por una escapada de esquí a Andorra y ha disfrutado de una bonita jornada en la nieve? *Consejo gratuito: después del esfuerzo llega la recompensa en modo Caldea 😉 El balneario de aguas termales por antonomasia. Aprovecha las ofertas de forfait en Andorra y combínalo con las actividades que te gusten. La nieve gusta a grandes y a pequeños.
No te resignes y rechaces un plan de esquí porque sean de las mías, de las que no saben esquiar. La jornada también puede ser divertida, pues la cuestión es que saber posturear. Es decir, hacer que eres una profesional de los esquís sin serlo. ¿Cómo?
Estos son los 5 tips para ser una profesional del postureo esquiador:
Postureo esquiador, puro y duro
1.- Ropa de esquí
No seas la paleta de pueblo y vayas con las Hunter porque esté lloviendo. Para la ciudad son estupendas, pero para esquiar… aborta misión ¡Hazme caso!
Antes del viaje vuélvete loca y pide ropa apropiada para no dar el cante. Mínimo una chaqueta de esquí/montaña, unos pantalones para soportar los culetazos (ni se te ocurra ir en vaqueros o mallas finas) y un calzado apropiado.
Y, por supuesto, incluye en tu maleta de esquí las gafas de sol. Se supone que es para protegerte de los rayos, pero en realidad es para salir mejor en las fotos de instagram hahaha Quedarás guapísima y disimularás las rojeces de tu cara a causa del frío.
2.- Localiza las cafeterías de moda
Ahí pasarás la mayoría del tiempo en tu jornada de esquí, no te engañes 😉
Después de tres caídas estarás hasta las narices cansada y querrás empezar a beber para olvidar las penas. Tómate unas cervezas o un zumito detox, ahora tan de moda, para recargar pilas.
Aunque tú aportación al esquí haya sido ínfima, mézclate con el ambientillo que se forma y evita hablar de tu jornada en la nieve.
PLAN B: Marchica, la discoteca de moda en Formigal
Está tan de moda que salen autobuses desde Madrid sólo para acudir a una de las fiestas que organizan.
Nuestro plan de Formigal fue algo atípico. Esquiar, esquiamos, bien poco. Nos decantamos por relajarnos en el Balneario de Panticosa y por la tarde a Marchica #asisomos…
3.- Las noches de esquí
Lo mejor de ir a esquiar es la fiesta que se forma por las noches. La mejor excusa para no ir a las pistas al día siguiente o visitar únicamente la cafetería.
Discotecas, bares, restaurantes, etc se preparan fin de semana tras fin de semana para recibir a las esquiadoras ansiosas de diversión. Y como todo deporte no va a ser, algún que otro bailoteo cae. Y lo que surja… 😉
4.- Sin miedo en el telesilla
No temas, agarra el telesilla con fuerza y a la primera. Si tienes miedo a las alturas no mires para abajo porque tienes que subir hasta alguna pista lo bastante importante para hacerte un buen selfie. Es la única manera que tienes para justificar un fin de semana en la nieve.
A la hora de bajar ni se te ocurra hacerlo esquiando. Si todavía no controlas coge otro telesilla y mira al infinito. Recuerda: todo es postureo esquiador, tus seguidoras estarán como locas para darle al like.
5.- Monitor macizo
Eres principiante y no pasa nada, nadie nace sabiendo. Eso sí, intenta que las niñas no se cachondeen de ti en las pistas irrisorias. ¡Mantén el equilibrio, por favor!
Y, por supuesto, si te decides por unas clases con monitor por lo menos que esté bueno y sea simpático. De ahí algo saldrá (¿otra foto para instagram? ¿Anécdotas que dan de sí un año?).
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